El comunicado que dieron a conocer, la actual reina de la ciudad, Maira García y las princesas Daiana Carrizo y Tatiana Santibañez expresa que “Ante la decisión tomada por el señor intendente Juan Pablo Luque, satisfaciendo la postura personal en contra de los reinados de la señora Sirley García, quien Ejerce la Secretaría de la mujer, género y diversidad, aludiendo a un cambio de cultura y señalándonos como “estereotipos negativos” queremos expresar nuestra posición al respecto”.
La ley 26485 en ninguno de sus artículos prohíbe las elecciones de reinas, este proyecto solo se basa en una opinión personal, infiriendo que estaríamos expuestas a “Violencia simbólica”. Nadie nos ha preguntado, si nos sentimos expuestas a tal violencia Simbólica.
Se intenta, por medio de ese autoritario argumento, pasar por encima de nuestro libre albedrio. Nadie nos preguntó, a nosotras, las “protagonistas que se exponen”, si sentimos violencia.
No se ha tenido en cuenta, que cada experiencia nuestra en la preparación nos ayudó a fortalecer nuestra autoestima, a descubrir diferentes capacidades y a empoderarnos como mujeres superando complejos e inseguridades. Las reinas somos las representantes culturales y turísticas del lugar.
Que el concurso en si, importa una experiencia, y una posibilidad laboral, para todas aquellas participantes, que representamos, trabajamos en proyectos solidarios sin distinción de géneros e inclusivos, con una gran labor social invisibilizada y jamás recibimos retribuciones económicas.
No nos exponemos a juicios de un grupo de personas a ser elegidas por un criterio “de belleza” y si así fuera ¿a quien le hacemos daño?, los estereotipos son juicios sociales, nosotras somos mujeres en pleno derecho de una equidad social.
Nos sentimos discriminadas y denigradas desde el lugar en el que públicamente hemos sido reemplazadas por una “elección y selección” de jóvenes destacados refiriéndose a rescatar valores de solidaridad y esfuerzo como si nosotras no los tuviéramos.
Nosotras también somos jóvenes profesionales, solidarias, deportistas y desarrollamos habilidades artísticas.
Públicamente nos han señalado como estereotipos negativos dañando nuestra imagen, honor, integridad, estigmatizándonos como símbolo de belleza, generando para nosotras una violencia mediática y siendo agredidas en diversas redes por un colectivo que no nos representa.
Las reinas son parte de la historia de la ciudad, y uno no puede desconocer la historia, si reconocemos que hay muchas cosas que se han hecho mal, que hay que ampliar criterios, que hay que aportar inclusión, pero también consideramos que decir públicamente desde el municipio que no quieren que los represente una “Figura femenina” es agraviante discriminativo y sexista, en vez de sumar diversidad de género y ampliar “Rango etario” para niños y adultos mayores, confiere a la “eliminación y reemplazo”.
Desde nuestro lugar seguramente realizaremos las acciones legales correspondientes pero indistinto a ello, agradecemos el incondicional apoyo de la Comisión de Reinas, coordinadores, padres y a la empatía de la comunidad, nos sentimos en el compromiso de no dejar a nuestra ciudad sin soberana por lo que estamos trabajando con nuestros escasos recursos para sumar representantes de los barrios, en su diversidad de género, incluyendo niños y adultos mayores, para que sean muchos más los que puedan representar a esta gran ciudad, trabajando para el futuro que queremos”.
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